Características de la mediación

Estas son todas las características que se toman en cuenta a la hora de realizar una mediación:

  • Voluntario: Las partes, estando oportunamente informadas, deciden si quieren formar parte o no, y tienen la posibilidad de abandonar la mediación en cualquier momento. La mediación es facultativa además para el mediador, quien puede finalizarla en el instante que crea oportuno o solicitar que otro mediador lo suplante.
  • No adversarial: Durante la mediación no se trata a las partes como rivales sino que se los trata como ayudantes y co-constructores de la solución para su problema.
  • Colaborativo: En las reuniones de mediación siempre se pide que las partes se comprometan a cooperar, de esta forma se asegura llegar a la solución del problema.
  • Flexible: Si ya se tiene una estructura definida para realizar la mediación, se puede modificar tomando en cuenta las particularidades de cada caso.
  • Confidencial: Antes de iniciar la mediación se tiene que firmar un acuerdo en el que se especifica que no se puede divulgar nada de lo que se hable durante la mediación puede hacerse público. Solo se hace una excepción en el caso de que exista o se sospeche que hay maltrato o negligencia contra un menor.
  • Autocompositivo: Ambas partes del conflicto son protagonistas en la mediación, ya que ambos deciden el contenido del contenido del acuerdo que se va llevar a cabo con el fin de resolver sus conflictos.
  • Judicialmente válido: El acuerdo que se firma por ambas partes, los abogados y el mediador, puede ser homologado por un juez, por lo que tiene validez ante una sentencia judicial.
  • Gratuito, rápido y económico: Lo máximo que puede tardar un periodo de mediación es de 90 días, la cantidad de reuniones varían dependiendo de las características del cada caso. Con una mediación se ahorra dinero, tiempo y daños emocionales.
  • Pacífico: El echo de que no se trate a las partes como oponentes hace que haya diálogo, entendimiento y paz durante la mediación.
  • Oral: En las reuniones predomina el diálogo entre las partes, y en casos especiales si la relación entre las partes es violenta las reuniones pueden hacerse privadas.

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